Truc
El bello Equilibrio
Mi pequeño Truc fue encontrado abandonado en la calle un día lluvioso de diciembre 2004. Lo encontró mi amiga Esther que no dudó un segundo en recogerlo. Esther lo llevó a casa de su hermana Merche y aunque les hubiese encantado quedárselo, ninguno podía hacerse cargo en ese momento.
Merche pensó en mi, y me envió un mensaje que decía “Ya tengo tu regalo de Navidad, Esperro que te guste”, jejeje…¡¡ qué sutil !!
Truc y yo iniciábamos entonces nuestra hermosa vida juntos.
No hay palabras para poder describir a tan grandísimo perro y a mi infinito amor hacia él. Fiel, equilibrado, cariñoso, líder, bello a rabiar. No hay bastantes adjetivos en el diccionario para describirlo.
Todo en su aura era hermoso, y siempre que no estábamos juntos, deseaba desesperadamente volver a su lado para compartir su mera presencia.
Al morir Rex se convirtió en el macho Alfa de la manada. Todos lo respetaban y lo cuidaban. Su actitud siempre era de calma y su carácter y decisión hacían que los demás confiaran ciegamente en él.
Le encantaba salir a la montaña y guiarse por sus instintos de caza. Él y Oto trabajaban en equipo como los medio lobo que eran, uno acechaba y el otro cazaba. Casi nunca había éxito en ello, pues gracias a la naturaleza, la mayoría de lo que perseguían volaba o corría mejor que ellos.
El destino quiso que se fuera al mes de irse Oto. La pena aceleró el cáncer que llevábamos peleando 7 meses. Vivieron juntos y murieron juntos para nunca estar el uno sin el otro, pues la unión tan especial que se tenían nada ni nadie podrá hacerla jamás desaparecer.
Sueño muchísimo con ellos, y así espero seguir haciéndolo hasta el día en que finalmente nos volvamos a encontrar y volver a disfrutar de la unión de nuestras energías de amor infinitas.
Gracias mi amor por haber compartido conmigo toda la belleza de tu ser. Siempre te llevaré conmigo a cada paso que de.